Un sencillo truco y además muy efectivo:
- Pon agua hirviendo y muy vaporosa en un cazo. Añade una mezcla de hojas de hinojo, ortiga y tila a partes iguales (hierba seca).
- Acerca la cara al cazo y cubre la cabeza con una toalla, para que el vapor de agua empiece a abrir los poros. Hazlo 15 minutos.
- Seca bien la piel con un pañuelo de papel; así no te resbalarán las manos al extraer los puntos y no te quedará marca.
- Cubre los dedos índices de las dos manos con un pañuelo de papel y aprieta una a una las espinillas y granitos. Hazlo con suavidad.
- Finalmente, exprime un limón y rebájalo con agua - si es de rosas mejor -. Utiliza la mezcla como tónico y deja que se seque.
Consejos:
Antes de empezar el baño de vapor, limpia la piel de la cara con tu desmaquillador o gel habitual. También puedes utilizar leche; es un buen limpiador natural.
Al secar la piel con el pañuelo procura que las zonas difíciles como los pliegues de la nariz quedan bien secos.
Si ves que una espinilla no sale fácilmente, no la fuerces. En la siguiente limpieza, ya habrá madurado y la extraerás mejor.
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